Tras persecución, cae “El Guayabas”, presunto líder huachicolero y generador de violencia en Tlaxcala y Puebla

Rommel PICHARDO

Tlaxcala, Tlax.— En un operativo de inteligencia coordinado, fuerzas de seguridad de Tlaxcala y Puebla lograron la captura de Gualberto N., alias “El Guayaba”, “El Guayabas” o “El Guayabo”, considerado uno de los principales generadores de violencia en la región y líder de una red dedicada al robo de gas LP.

La detención se concretó la tarde del miércoles 20 de agosto, luego de una persecución que inició en Ixtacuixtla, Tlaxcala, cuando el sujeto fue alertado por un “pitazo” de la presencia policial. Al intentar huir hacia territorio poblano, fue interceptado donde se le aseguraron 80 dosis de droga, un arma corta calibre 9 mm y la motocicleta en la que intentaba escapar.

De acuerdo con fuentes de inteligencia, “El Guayabas” mantenía operaciones en Tlaxcala y Puebla, dedicándose al robo de hidrocarburos en ductos de Pemex, narcomenudeo, extorsiones a comerciantes y transportistas, robo de transporte de carga, así como homicidios y ataques armados. Entre ellos, se le atribuye la ejecución de dos hombres en Tlalancaleca —hecho en el que un niño de 4 años murió por una bala perdida—, la explosión de una pipa de gas en Santiago Coltzingo y su presunta participación en el asesinato de Antonio N., alias “El Señor Guzmán”, en la carretera Ixtacuixtla–Nanacamilpa.

Asimismo, las indagatorias lo relacionan con la ejecución de Areli N., alias “La Reyna del Huachicol”, registrada en abril de 2025 en San Francisco Tlaloc, y con un atentado en su contra en Atotonilco, Ixtacuixtla, donde fue hallada una granada de fragmentación activa.

Investigaciones ministeriales señalan que operaba bajo las órdenes de Jalit N., alias “El Mamer”, detenido en 2021, y mantenía vínculos con Mario Alberto N., “La Marrana”, presunto exjefe de plaza del CJNG en Puebla. Incluso, se presume que tejió alianzas con el grupo “La Barredora”, lo que lo vincularía con el hallazgo de seis cabezas humanas desolladas ocurrido el pasado 19 de agosto en Ixtacuixtla, Tlaxcala.

“El Guayabas” era considerado objetivo prioritario por autoridades federales y estatales. Su captura representa un golpe importante en la estrategia de seguridad contra el robo de hidrocarburos y el crimen organizado que en los últimos meses han impactado severamente a Tlaxcala y Puebla.