Activistas del colectivo Toktli han manifestado su preocupación ante la poda extrema de cinco árboles en la ciudad, una práctica que consideran un ecocidio debido a sus efectos negativos en la biodiversidad, la calidad del aire y el bienestar de la comunidad.
A través de un pronunciamiento público, los ciudadanos solicitaron a las autoridades locales información clara sobre las normativas que rigen la gestión del arbolado urbano. Además, propusieron la creación de una mesa de diálogo con especialistas y representantes gubernamentales para establecer mecanismos confiables de protección y conservación.
También plantearon la elaboración de un «Decálogo Municipal» que oriente el manejo adecuado de los árboles urbanos, asegurando la participación activa de la sociedad civil.
Para visibilizar su demanda, los ciudadanos convocaron a una manifestación pacífica, con el objetivo de promover soluciones y exigir transparencia en la gestión ambiental del municipio.