Quiero enviarles un abrazo muy especial, de parte de su amigo, Ángelo Gutiérrez Hernández, de mi esposa Miriam, de nuestras hijas, para celebrar con ustedes, la alegría, la paz y la unidad en esta época del año.
Este año si bien ha sido complicado, sirva esta época para reflexionar, para perdonar, para planear y fijarnos más metas; nosotros lo estamos haciendo seguros de que seguiremos concretando acciones que dan gusto y para beneficio de nuestra gente.
Siempre es momento de dar gracias a ustedes por su confianza, exigencia y apoyo, y también para valorar a todos y a todo lo que tenemos a nuestro lado.
Les reitero que la grandeza de nuestro Apetatitlán y de Tlaxcala, está bien cimentada en los valores y las tradiciones familiares, tradiciones que nos dan identidad, que nos dan rumbo, que nos recuerdan de dónde venimos y hacia dónde vamos.
Esta temporada es propicia para que valoremos lo afortunados que somos de poder compartir la dicha que la vida nos regala, de seguir teniendo con quién compartir nuestra mesa.
Por ello, les conmino a que abramos nuestros corazones al espíritu de la Navidad y en nochebuena saquemos nuestra mejor sonrisa, sentémonos a la mesa y llenemos esos espacios vacíos con amor, con júbilo, con esperanza de que el próximo año podamos reunirnos nuevamente y de que vendrán mejores tiempos para todas y todos.
El año que ya se avecina será de grandes retos y de que todos tomemos decisiones que marcarán el futuro; que sea la razón y el bien de nuestro país, Tlaxcala y Apetatitlán, el que se anteponga a cualquier interés personal.
Amigas y amigos, desde mi corazón, les deseo una Feliz Navidad y que el año 2024 nos llene de las más grandes alegrías.
Que la salud y armonía reinen en cada uno de sus hogares y corazones, que todos tengamos una vida plena de salud, paz y amor para cumplir metas y sueños que nos forjemos, mientras que nosotros seguiremos trabajando para concretar más acciones que den gusto.
