Esta ha sido una época singular y sumamente complicada para todo el mundo, la enfermedad, el confinamiento, y las dificultades económicas que ha traído consigo el Sars Cov 2 conocido como Covid 19 han puesto a prueba nuestra templanza, nuestra fe y nuestra capacidad de adaptación, todo esto no ha acabado sin embargo parece aumentar la esperanza y el espíritu humano busca ansiosamente regresar al momento donde nuestra vida era «normal» las cicatrices y las ausencias son muchas y este es el momento de demostrar que podemos con orden, fuerza y madurez reactivar nuestro entorno.
Tlaxcala fue ejemplo en el manejo de la pandemia y en este momento es punta de lanza en temas de reactivación económica, El Gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez y el Consejo Estatal de Salud han manejado con prudencia y firmeza el aspecto de la reactivación taurina que es sumamente importante para el estado y han confiado en que los aficionados a la fiesta brava sabremos responder a este reto, el 20 de febrero pasado se realizó el primer festival con público en el Rancho La Escondida de Tetla como festejo piloto supervisado por la Coordinación Estatal de Protección Civil y el Instituto Tlaxcalteca de Desarrollo Taurino donde se pusieron todas las medidas sanitarias exigidas por las autoridades estatales de Salud.
Pasada esta prueba el 27 y 28 de Febrero se realizaron dos Corridas de Toros por las empresas Toro Tlaxcala y Espectáculos Ortega en Huamantla y el lunes 1 de marzo un Festival gratuito de jóvenes figuras coordinado por el municipio de Apizaco en la Plaza Rodolfo Rodriguez «el Pana».
El ánimo fue impresionante y estos festejos aún con restricciones significaron una bocanada de oxígeno puro para la Tauromaquia y todas las personas que gracias a ella llevan el sustento a sus hogares.
Tlaxcala gracias a la sensibilidad de sus autoridades que no se arredraron por la impresionante labor de la sanitización y a su afición que fiel a sus tradiciones taurinas ha dado el paso pa lante para regresar a las plazas.
Es necesario agradecer a todos, ganaderos, toreros, subalternos, medios de comunicación, vendedores, músicos, autoridades, pero sobre todo a las empresas que arriesgan su patrimonio y a las autoridades estatales que apoyan a su afición y se echan a cuestas la difícil tarea de supervisar que este regreso sea ordenado y sustentable.
Señores Gracias «Habemus Toros».
Atentamente Angel Sainos
