En Corto

Por: Iliana CERVANTES

Graves, muy graves, son las acusaciones hechas por una Persona Privada de la Libertad (PPL) a través de un video que circula en redes desde hace unos días. Denunciar que son los propios internos quienes salen a delinquir y robar en las calles, supuestamente con la venia de quien fuera su director, no es un asunto menor. Y si a eso sumamos las extorsiones internas para que los reclusos puedan “vivir en paz” dentro del penal, el panorama se vuelve todavía más oscuro. Pero nada se compara con lo verdaderamente atroz: que una autoridad haya pedido la desaparición de otra persona.

Ayer, tras un evento oficial, el Secretario de Gobierno Luis Antonio Ramírez Hernández y el de Seguridad Ciudadana Alberto Perea Marrufo fueron cuestionados al respecto. Ambos coincidieron en que se realizan las investigaciones correspondientes y que no habrá impunidad: “caiga quien caiga”.

Como medida inmediata, el director del Cereso de La Loma Xicohténcatl fue removido del cargo; aunque, según el Secretario de Gobierno, ahora realiza “otras funciones”. Quizá, y solo quizá, lo más prudente sería mantenerlo fuera de cualquier función pública mientras se aclaran los hechos.

Por cierto, el nuevo coordinador de Comunicación Social del Gobierno del Estado, Antonio Martínez, estrenó su estrategia “Diálogo Circular”, en la que funcionarios de primer nivel abordan temas relevantes de sus áreas y responden preguntas de los medios. Ayer participaron los secretarios de Cultura, Salud y Agricultura. Y, claro, el tema de la denuncia del PPL también estuvo sobre la mesa.

En otro frente, la gobernadora Lorena Cuéllar y el Secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes federal, acompañados de autoridades estatales y federales, dieron el banderazo de inicio del Distribuidor Vial Chiautempan.

Una obra con inversión histórica de más de 600 millones de pesos que beneficiará a más de 70 mil ciudadanos, habrá un ahorro de hasta 20 minutos en su traslado. La promesa es tenerla lista en septiembre de 2026, mucho antes de los tres años inicialmente previstos. Mientras tanto, habrá que tomar precauciones: rutas alternas, salir más temprano… y mucha paciencia.

Así las cosas: entre denuncias que cimbran y obras que ilusionan, Tlaxcala avanza, aunque el camino, como siempre, tenga sus baches.

Con el gusto de siempre, nos leemos en la próxima